Blog

Cuando se trata de comprar casa, normalmente piensas a largo plazo y un poco en tus planes a futuro: si vas a quedarte a hacer toda una vida, tal vez formar una familia o, si ya tienes una, en darles un espacio ideal para complementar su estilo de vida. Podrías enfrentarte con este dilema: ¿remodelar o comprar nuevo?, pues en todos los medios vemos esas increíbles historias de casas antiguas que fueron compradas, pasaron un arduo y tedioso proceso de makeover y de pronto se convirtieron en casas de ensueño, que se ven como nuevas. Pero ¿te has puesto a pensar en si realmente valdría la pena hacerlo? ¿Por qué no mejor comprar una casa nueva y recién construida, de esas que parecen salidas de una revista inmobiliaria? Bueno, para ayudarte en esa decisión que definitivamente marcará un punto importante en tu vida, te daremos algunos pros y contras de ambas opciones, que son puntos de coincidencia de arquitectos, renovadores, interioristas e incluso de corredores inmobiliarios.  

    Remodela y vive feliz: ventajas

Si ves la posibilidad de comprar una casa usada, te encontrarás con algunos puntos a considerar, como antigüedad, ubicación, metros cuadrados, construcción, instalaciones, servicios, accesibilidad y más. Hablaremos de las ventajas de una casa usada con una vida media (entre 10 y 25 años) tomando en cuenta que para los créditos bancarios no es rentable adquirir una cercana a los 100 años. Ubicación. Las casas antiguas generalmente pueden encontrarse muy céntricas en las ciudades, y si buscas mudarte a una buena zona dentro de la ciudad, puede ser excelente opción. Extensión. Hace algunas décadas no había tanta preocupación por el ahorro de espacio como lo hay ahora, así que, en casas antiguas, es más probable encontrar habitaciones grandes, techos altos y jardines extensos. Cambios estructurales. Las reglas de construcción actuales usan técnicas y materiales distintos a los de antes, lo que hace menos probable tener que remover muros o cambiar estructuras, pero en las de más años, la flexibilidad y versatilidad para hacer ampliaciones, divisiones, ventanas o cambios más importantes es mucho más viable, pues sus estructuras y materiales son más nobles. Funcionalidad. En casas no muy viejas, de menos de 10 años, es poco común encontrar fallas en suministros de agua, luz, gas, etc., pues al haber sido anteriormente habitadas, lo más seguro es que todas estas instalaciones estén en muy buenas condiciones. Vecinos. En zonas de casas que tienen ya más tiempo, vas a ver que hay familias que han estado ahí durante muchos años, incluso algunas generaciones, lo cual puede darte un cierto nivel de seguridad en cuanto a que seran, por lo general, gente respetuosa de su entorno y de los demás. Tendrás la ventaja también de los negocios locales en el área, que te permitirán hacer comunidad y no ir muy lejos para encontrar lo que buscas.  

   

    También hay desventajas…

Al adquirir una propiedad antigua, en definitiva, adquirirás también uno que otro problema. Puedes encontrarte con algún daño en instalaciones, que, para revisarlos y repararlos, invariablemente habrá que romper muros aquí y allá. Puedes encontrar cosas que no se vean de primera mano, como humedad, alguna plaga (por ejemplo, polillas en estructuras de madera), tal vez el ruido a cierta hora del día o un drenaje poco eficiente. Posiblemente deberás invertir en calefacción y/o aire acondicionado nuevos, y si es muy antigua la casa, incluso tendrías que cambiar por completo tuberías e instalación eléctrica, pues antes se usaban materiales que para la actualidad seguramente estarán mal aislados o dañados. Una casa usada tendrá que esperar bastante más tiempo para habitarse y debes ser consciente de que su plusvalía no será similar a la de una casa nueva.  

    Lo nuevo se estrena: ventajas

Si compras una propiedad nueva, definitivamente hay muchas ventajas también, entre las cuales tenemos: Emocionales. No hay nada parecido a la sensación que causa en los seres humanos el hecho de estrenar algo: Entrar a tu casa nueva, recién construida, con ese olor a nuevo, todo recién hecho, vacío y listo para ser habitado únicamente por ti y tu familia, si la tienes. Decoración. Normalmente elegirás tu casa nueva de acuerdo con algún patrón que estés buscando, y lo que más se acerque a eso será tu lienzo en blanco para decorar con el estilo, los colores, la disposición y los objetos que te hayas imaginado. Zona. Los desarrolladores de complejos habitacionales por lo general buscan localidades bien ubicadas y planeadas para ofrecer una excelente calidad de vida, por lo que podrás encontrar una casa nueva en una zona muy bonita y especial. Además de que actualmente se hace mucho énfasis en las amenidades como gimnasios, piscinas, centros comerciales e incluso cines, que forman parte del complejo. Estructura. Con las nuevas normativas y materiales para la construcción, existen casas nuevas muy innovadoras, de estructuras mucho más seguras y resistentes, que podrán darte tranquilidad de saber que tu hogar es un lugar seguro. Garantía. En algunos países y ciudades se ofrece una garantía por uno o más años sobre fallas en instalaciones de servicios, muebles como la cocina, los closets, las ventanas, etc. Y esto representa una gran ventaja, pues si la propiedad tiene defectos en su construcción o funcionalidad, las reparaciones quedarían cubiertas por el vendedor. Además, todo será nuevo, por lo que no tendrás que hacer reparaciones o revisiones exhaustivas salvo cambios en detalles por diseño.  

    Es nuevo, pero también tiene cola que le pisen

Hay cosas que pueden pasar al comprar casa nueva, así que ten en mente los siguientes puntos: Una casa nueva, sí, está recién construida, recién pintada y con acabados impecables (la mayoría de las veces), pero toma en cuenta que las construcciones deben tener un cierto nivel de asentamiento, es decir, la propia estructura debe irse acomodando en el suelo y subsuelo, por lo que podrás ver algunas cuarteaduras menores en los muros o ciertos detalles que te hagan pensar que algo está mal, aunque no necesariamente será así. La casa ya construida que elegiste no podrá ser alterada en cuanto a estructura con la facilidad con la que se remodela una casa antigua, pues los materiales tienden a ser más sólidos en la actualidad. Así que es posible que debas acoplarte a los espacios tal y como están y resistirte en caso de querer hacer cambios drásticos. Posiblemente sea una zona muy linda, pero, al ser nueva, no necesariamente encontrarás vecinos tranquilos y con raíces. Y si buscas ese sentido de comunidad en los habitantes, es menos probable que vayas por ahí caminando y saludando al de la cafetería local o a la tierna señora de la pastelería de toda la vida. Normalmente, en nuevos desarrollos habitacionales, hay que salir en automóvil a otra zona a hacer las compras necesarias. Puede ser que encuentres casas construidas en poco terreno, pues actualmente el aprovechamiento de los metros cuadrados se maximiza para construir un número mayor de propiedades en una cierta extensión de tierra. Por último, parece algo en lo que no pensarías, pero, en propiedades nuevas, la vegetación también es reciente, así que si quieres tener un árbol grande en tu jardín, o dando sombra a tu casa, también debes esperar años hasta que crezca, y, dependiendo del lugar donde vivas, es posible que debas proteger de las heladas a las plantas pequeñas mientras crecen y afianzarlas para soportar fuertes vientos cuando así lo requieran. Ahora ya tienes un amplio panorama sobre los pros y contras de ambas opciones, la decisión será un poco más sencilla, pues tienes más herramientas para elegir si tus costumbres, preferencias, necesidades y tu tiempo son perfectos para remodelar a tu antojo una casita antigua, o si te fascina la idea de estrenar. Tal vez ninguna de estas opciones sea tu hit y este artículo te haga decidir comprar un terreno y construir una casa desde cero a tu entera satisfacción, lo cual nos hará muy felices, pues hemos puesto un granito de arena para ayudarte a ver con claridad lo que tú y tu familia necesitan, no sólo para adquirir una casa, sino para formar un hogar y un patrimonio que tenga un estilo único y dure mucho tiempo. ¿Sabes de alguien que esté pasando por una situación similar? Compártele este artículo y dinos cómo le fue.