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Conoce los propósitos de año nuevo que nunca o casi nunca se cumplen

12 propositos

Es toda una tradición de muchas personas comer 12 uvas al momento exacto de cambio de año y con ello, pedir un deseo por cada una. Otros en cambio, hacen una lista de propósitos a cumplir para ser mejores; sin embargo, no tienen el compromiso de crearse el hábito para cumplirlos y terminan en palabras al viento.

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Scranton, Pensilvania, el 90% de las personas fallamos al momento de cumplir nuestros propósitos de año nuevo. Esto puede deberse a varios factores:

  • Los propósitos los hacemos como sueños, no como compromisos: es decir, solo deseamos que nuestra vida cambie mágicamente, sin ponernos a trabajar en ello.

  • Los propósitos no se miden: No ponerse un plazo para cumplirlo es uno de los grandes fracasos, así como no tener un plan de acción.

  • No tenemos una estrategia: Muchos planean ahorrar o pagar el gimnasio para bajar de peso, pero en primera no se define el monto de ahorro mensual y segundo, tampoco se comprometen a mejorar los hábitos alimenticios, para realmente ver cambios favorables. Sin mencionar, la cantidad de dinero que pierdes cada vez que pagas una mensualidad y asististe muy poco al gimnasio, sin una rutina en específico y por ende, sin motivación.

  • Tus propósitos parecen más milagros que metas: No necesitas 12 metas que cumplir, necesitas metas en las que realmente te comprometas a trabajar para cumplirlas y disfrutarlas. Pueden ser cinco o dos, la cantidad depende de tus circunstancias, por eso te enlistamos la importancia de ser realistas y sobre todo, que se ajusten a tu estilo de vida.

  • Careces de motivación: Adquirir nuevos hábitos para cambiar tu vida y mejorarla, puede tomar tiempo, pero una vez que estás encaminado te terminas acostumbrando y siempre preferirás mejorar. Llegar a ese punto es difícil, por eso si un plan no te funciona, una dieta no está dando resultados o simplemente, tienes días malos, recuerda que todo es pasajero, tómate un respiro y después continúa con el plan.

  • No te dedicas suficiente tiempo: Analizar a profundidad dónde estás parado y cuánto te falta para llegar a dónde estás, saber qué necesitas o simplemente, darte unos días de descanso, es muy necesario para cumplir tus metas. Recuerda que no eres una máquina y necesitas tiempo para todo, para invertir en ti, en tu salud, en el ejercicio, en las actividades que te hacer sentir pleno, porque esto también es parte de tu vida.

Ponte como prioridad cuando sientas que lo necesitas y recuerda que no necesitas llenarte de muchos propósitos, tampoco compares tu vida y/o resultados con otros, recuerda que tienes tus propias circunstancias y el camino que necesites tomar para llegar a tus metas, probablemente sea muy distinto al de los demás.