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¿Cómo ampliar mi línea de crédito?

Woman handing over credit card at cash register

¿Estás pensando en hacer algunas compras?

En el momento en el que te aprueban tu tarjeta de crédito, recibes con ella una línea de crédito que el banco calculó de acuerdo con los datos que les proporcionaste y de acuerdo con tu historial crediticio. Dado el caso de que no tengas historial, el banco puede utilizar otros parámetros para determinar el riesgo y poder asignarte el monto de tu línea. Generalmente, cuando es una primera tarjeta, tu línea de crédito será reducida y puede ir incrementando con el paso del tiempo.

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El banco hace constantemente evaluaciones de las líneas de sus tarjetahabientes y en cualquier momento podrías recibir un mensaje de texto, correo electrónico o llamada telefónica para que aceptes la ampliación de tu línea, por lo que en realidad no hay mucho que hacer sino esperar. Aunque, por supuesto, tú también puedes realizar esa llamada para solicitar la ampliación de la línea sin tener que esperar a que el banco lo haga por ti, solo que la ampliación no se dará de inmediato; el banco generará un ticket y el área correspondiente se encargará de la aprobación, de la que te informarán mediante un mensaje de texto o en una siguiente llamada telefónica. En algunos casos el proceso puede ser más complicado y te solicitarán que entregues una carta en tu sucursal con la exposición de motivos y luego te darán a conocer el resultado del análisis realizado. En internet hay muchos formatos gratuitos para poder realizar esta carta, sólo busca el término “ampliación de línea de crédito”. Debes tomar en cuenta algunas cosas, sobre todo estas dos variables, muy importantes:
  1. Tu capacidad de pago
  2. La administración de tus finanzas

Tu capacidad de pago

La capacidad de pago es el dinero que, después de haber cubierto todos los gastos que tienes habitualmente, te resta para poder pagar compromisos como deudas o ahorro. Generalmente la proporción debe de ser al menos del 30% de tus ingresos, es decir, la nueva deuda contraída no debe ser mayor a este porcentaje para que el pagarla no sea una carga. La línea de crédito se establece para que puedas hacer compras a 12 meses; por ejemplo, si tu 30% disponible en el mes es de $3,000 pesos, tu línea podría ser de $36 mil pesos. De esta forma podrías adquirir productos y diferir sus pagos a este plazo y podrías pagarlos cómodamente.

La administración de tus finanzas

Si normalmente eres un buen pagador, cubres el saldo de tu tarjeta en un 100% y no tienes atrasos, es probable que la ampliación de tu línea de crédito te pueda ayudar a salir de algunos imprevistos cuando lo requieras o que te permita hacer compras de más productos sin el temor de que tu línea de crédito se sature. Pero, si, por el contrario, no tienes una buena administración de tus finanzas personales, y te atrasas constantemente en los pagos de tu tarjeta, entonces es probable que una ampliación de tu línea de crédito lo único que te provoque sea mayores problemas en lugar de beneficios, por lo que para solicitar una ampliación de tu línea tienes que tenerlo bien pensado y hacer un análisis a conciencia.

La aprobación de la ampliación de tu línea

Un banco genera sus ganancias en un 75% a través del uso de las tarjetas de crédito. Entre los ingresos generados por las tarjetas, una parte se encuentra en el interés que cobran por el préstamo del dinero, pero además de eso, los mayores ingresos provienen del cobro de penalidades, comisiones e intereses moratorios por los atrasos en los pagos o los pagos parciales de los saldos. Hay un equipo que se encarga de analizar el pago de las tarjetas y de hacer evaluaciones para poder ampliar la línea de crédito de un grupo de tarjetahabientes. Un banco no puede hacer la ampliación de una línea de crédito sin haber hecho un análisis previo del comportamiento de pagos del cliente. La ampliación debe traer un beneficio para ambas partes, por un lado, mayor comodidad para el cliente: una ampliación le permitirá hacer compras de un ticket promedio más alto; y, por el otro lado, crear un mayor negocio para el banco a través de más y mejores consumos.

El mejor analista eres tú

El banco siempre está buscando la forma en la que los clientes puedan hacer un mayor uso de sus tarjetas de crédito y por ese motivo podrían no ser tan estrictos en sus análisis para hacer ampliaciones en los créditos, todo con el afán de incrementar de forma acelerada la colocación de más créditos. Por esta razón creo que el mejor analista para la ampliación de una línea de crédito eres tú. Tú sabes cuáles son tus ingresos y cuál es tu capacidad de pago, lo que te sobre para adquirir una deuda es lo que tu línea de crédito debería ser. Para mí la regla es: si el 30% de tus ingresos es $3,000 pesos al mes, sólo $3,000 pesos debería ser tu línea de crédito, y no más.

¿Qué pasa si no quiero ampliar sino reducir?

Claro, también tienes esta opción, y para ello no se requiere la aprobación del banco, con una simple llamada puedes llevar tu línea de crédito al monto que tú selecciones y el banco no tiene opción más que aceptar tu solicitud. Además, será una línea de crédito que, con tu previo análisis, será la mejor para ti y que no debe ser un problema pagar cómodamente, lo que siempre es conveniente para un banco, que lo que menos quiere es tener un incremento de sus cuentas morosas.

Saca provecho de tu tarjeta

A veces parece inevitable pensar que no podemos adquirir algo sin solicitar un crédito, pero es una realidad; sin los créditos que obtenemos por parte de las instituciones financieras no podríamos comprar muchos productos, sobre todo en el momento en el que los requerimos. Gracias a la competencia que existe entre los bancos y a que cada vez más actores entran en la competencia de los créditos para el consumo, las tasas de interés se han reducido con el paso de los años, lo que nos permite tener acceso a un dinero que es más económico que antes. Por lo anterior, es importante utilizar con inteligencia nuestra tarjeta y sacarle el mayor provecho. Te dejo estos tips que nos proporciona la Condusef. ● Siempre paga tu deuda antes de la fecha límite establecida: en caso contrario, te cobrarán intereses moratorios, es decir, un recargo adicional por el atraso del pago de la cuota del préstamo, más los intereses normales. ● No tengas más de una tarjeta de crédito: esto puede generar un descontrol en tu bolsillo, lo recomendables es cancelar aquellas que cobren mayor tasa de interés o anualidad. ● Siempre que puedas liquida tu deuda: si esto no te es posible, al menos realiza el doble del pago mínimo requerido. Consejos para utilizar el pago mínimo a tu favor ● Paga el mínimo sólo cuando consideres que es por un caso de emergencia y no puedas cubrir un poco más, ello te permitirá no afectar tu historial y evitar los intereses moratorios. ● Si tus deudas son demasiado altas y no te queda otra opción más que pagar los mínimos te recomendamos refinanciar tu deuda con otro crédito más barato, a menor tasa anual. ● Puede ser a través de un banco o alguna institución que te permita liquidar el total de tu deuda y pagar cómodamente un monto igual o menor a tu pago mínimo. ● Antes de recurrir a esta medida debes saber cuánto tiempo te tomará liquidar tu deuda con los pagos mínimos y la tasa de interés anual de la tarjeta. Fuente: www.condusef.gob.mx Recuerda que el buen manejo de tu tarjeta de crédito te ayuda a incrementar tu score crediticio, que es la calificación de todas las instituciones de crédito con las cuáles has tenido relación. Este score lo calculan de acuerdo con la forma en la que pagas, si eres puntual o si has llegado a tener atrasos, esta información le sirve a tu actual entidad de crédito para determinar qué tanto puede incrementar tu línea de crédito.

¿Tienes un mal historial crediticio?

Nunca es tarde para enderezar el rumbo; recuerda que la información de tu historial va cambiando conforme tus hábitos de pago lo van haciendo.